domingo, 23 de agosto de 2015

Diseñando un submarino para explorar los mares de TITAN

Por: Miguel Angel Pinilla Ferro

Saturno el segundo mayor planeta del sistema solar, fácilmente reconociblemente por sus anillos y recientemente por su gran tormenta hexagonal en su polo norte; tiene más de doscientas lunas. Entre todos los satélites que tiene Saturno hay uno que se destaca, Titán. Y se podría decir que es casi un planeta por su composición rocosa y por  poseer una densa, marrón y exótica atmósfera de hidrocarburos y nitrógeno. Pero no lo es. Es una de las Lunas más interesantes del sistema solar, precisamente por su composición. 
Pero lo más importante es que Titán, al igual que la tierra, tiene nubes, mares, lagos, ríos,...que sin ser de agua son de metano. 


Los mares del hemisferio norte en Titan, vista esquemática de radar construida a partir de los datos enviados por la sonda espacial Cassini. 




Dado que la temperatura de Titán ronda los -180°C, se tornan líquidos todos los gases que aquí en la tierra son gaseosos, y en particular la amplia composición de metano. Por lo tanto, Titán tiene un ciclo de metano equivalente al ciclo del agua en la Tierra: este se evapora, se condensa, forma nubes y luego se precipita formando ríos que desembocan en lagos o mares repitiéndose el ciclo. 
Uno de los aspectos más interesantes que ofrece su exploración es entender la compleja dinámica climática que ofrece el metano, a semejantes distancias lejos de la influencia total de la radiación solar. Es una nueva química de los gases, a tan bajas temperaturas, una nueva reología ambienta y constituye paisajes que son únicos, que ofrecería nuevos paradigmas en la comprensión de las etapas de formación planetaria de cuerpos en las periferias de las estrellas. 


Imágenes de radar que relacionan ríos de metano que desembocan en el mare kraken en Titán. 

Hasta el momento no se tiene certeza de la profundidad y densidad de estos mares, por lo menos para poder establecer el parámetro de flotabilidad si se  llega a enviar ya sea un barco o un submarino. Lo más interesante sería un submarino, no solo por que se protegerían todos los instrumentos científicos en la capsula que los albergase, sino también por la eficiencia que tendría el dispositivo. Como la presión atmosferica de Titan es menor que en la tierra, el submarino sería capaz de hundirse a mayor profundidad,  y así estudiar la composición de los mares de Titán y que mejor recoger muestras con el fin de evaluar la posibilidad de desarrollo de probiontos en esas condiciones. 



Recientemente la NASA, lanzó un concepto de como sería un submarino que explorase el mare Kraken en Titán. Dada la menor densidad que tiene a esas bajas temperaturas el metano con respecto al agua en la tierra, el submarino tendría una alta eficiencia a la hora de moverse. ¿Que instrumentos tendría? Sonares para establecer posición con respecto a la profundidad y estructura del kraken mare, diversos espectrómetros en diferentes longitudes de onda, cámaras submarinas y un amplio paquete de experimentos astrobiologicos para determinación de huellas que impliquen metabolismo y/o descomposición de protobiontos. 
Lo cierto es que hasta ahora solo es un concepto, pero es absolutamente inquietante imaginar como sería el nivel de tolerancia física de los materiales electrónicos, mecánicos, de telemetria a tales ambientes, y sobre todo la obtención de datos libres de ruido. 

FUENTES. 


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